
Aunque parece una pregunta sencilla, lo cierto es que la experiencia en carretera demuestra que no todos los conductores tienen claro cuándo usar el carril izquierdo, pese a que hacerlo de manera inadecuada conlleva peligros reales e incluso sanciones económicas.
Retomamos el tema que publicamos el pasado 2 de abril sobre la circulación en vías rápidas con este artículo publicado por Fundación Mapfe – Seguridad Vial. Lo repoducimos:
Repasar las recomendaciones y la normativa a la hora de conducir nunca está de más, y menos si se trata de una mala práctica al volante que suponga un peligro para nosotros y para el resto de los vehículos de la carretera. Uno de los temas que levanta más polémica por la práctica real tras la reglamentación y por la disparidad de opiniones entre los conductores es precisamente cuándo usar el carril izquierdo.
Las normas de tráfico son muy claras al respecto: si estamos en una autopista o autovía con más de un carril en el mismo sentido, como norma general habremos de circular por el que está situado más a la derecha. Como excepciones, podremos usar el carril izquierdo (o los centrales, en caso de que los hubiera) a condición de que no se entorpezca la marcha de otros vehículos que puedan seguirnos, así como cuando las circunstancias del tráfico o de la vía lo aconsejen.
De aquí, se puede extraer que podremos usar otros carriles diferentes al de la derecha, si nuestra intención es adelantar al coche que nos precede o facilitar la incorporación de otros vehículos que vengan por nuestra derecha, siempre que ninguna de estas dos opciones perjudique al resto de los conductores que ya estén en la vía.
Sin embargo, la experiencia real nos demuestra que en muchos casos, los carriles centrales y de la izquierda cuentan con más tráfico incluso que el derecho, pese a la normativa expresa al respecto. Muchas veces, la percepción general es que el carril de la derecha está reservado a los coches más lentos o camiones de alta carga, y algunos conductores eligen el de la izquierda pensando que evitarán ralentizaciones. Pero lo cierto es que no es lo correcto, entorpecerán la circulación de vehículos que quieran adelantar, provocarán adelantamientos en paralelo durante demasiado tiempo, y lo que es peor, propiciarán la práctica de adelantamientos por la derecha, altamente peligrosos.
Es por esto que circular por el carril de la izquierda está sancionado con una multa de 200 euros y se considera una infracción grave, según la Ley de Tráfico, Circulación de Vehículos a Motor y Seguridad Vial, al ser una práctica de alto riesgo de accidente.
Estas indicaciones acerca de cuándo usar el carril izquierdo nos ayudarán a mantener una conducción más eficaz y segura, puesto que lo importante es llegar a nuestro destino y evitar exponernos al peligro innecesariamente. Nuestro rol como conductores tiene una relevancia activa y de nosotros depende en gran parte llevar a cabo una conducción sana y segura. No obstante, para todos aquellos imprevistos que no se pueden evitar, podemos contar con el que nos ofrece la mejor cobertura para no tener que preocuparnos de nada más que de estar cómodos al volante.
Enlace a la noticia en la web de la Fundación Mapfre – Seguridad Vial
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